En la tarde de ayer la Junta Local del Partido Popular de Almansa salía públicamente en defensa de la Gerenta del Hospital de Almansa, Asunción Cuenca.
Hace unos días la diputada regional almanseña Pilar Callado anunciaba la voluntad del nuevo gobierno regional de cesar de su cargo a la gerente del hospital comarcal de Almansa, la también almanseña Asunción Cuenca. Pilar Callado negaba que fuera por motivos políticos sino por su deficiente gestión al frente del hospital y falta de capacidad.
En cuanto a su gestión, el presidente del Partido Popular de Almansa, Ramón Rodríguez, daba a conocer los datos oficiales del hospital comarcal de Almansa extraídos de las memorias 2011 (antes) y 2014 (Asun) y que se podrán consultar en nuestras redes los próximos días. Las cifras y la gestión que ha evitado la quiebra y la consiguiente privatización de la gestión del hospital.
Lo que no entendemos es que a Pilar Callado, que es licenciada en historia del arte, le hayan nombrado presidenta de la comisión de sanidad. El problema es que cuando alguien ostenta un puesto para el que no está preparado ocurre como dice el refrán “que de estos polvos vienen estos lodos”, y es que es absolutamente paradójico no solo que la presidenta de la comisión de sanidad sea una licenciada en historia del arte (no hay médicos) sino que sea capaz de decir sin ningún pudor que estas cifras son una mala gestión y este currículum de una persona poco capacitada.
Asunción Cuenca HA EVITADO LA QUIEBRA DEL HOSPITAL COMARCAL DE ALMANSA, HA EVITADO LA PRIVATIZACIÓN DEL HOSPITAL EN CUANTO A SU GESTIÓN.
LA VERDAD es que quien quiere el cese de la almanseña Asunción Cuenca, NO SON LOS TÉCNICOS DEL SESCAM, es la portavoz socialista del ayuntamiento Mª Carmen Valmorisco y la diputada regional Pilar Callado que son las que están alentando su cese.
Y los MOTIVOS están bien claros: el día que Asunción Cuenca, como ciudadana almanseña, quiso participar democráticamente en las elecciones municipales y expresó públicamente su apoyo a Paco Núñez, ese día fue condenada por Mª Carmen Valmorisco y Pilar Callado. Y es que algunas personas hacen que vivamos en una democracia trampa: respetamos que cada uno tenga sus propias ideas incluso alabamos la diversidad de pensamiento, de opciones políticas, aludiendo que da mayor riqueza a la democracia, pero todo eso es mentira porque OJO como te manifiestes públicamente atente a las consecuencias, habrá represalias (familiar, laboral…). Y esto es lo que es: una venganza política que va a sufrir el hospital de Almansa y nosotros, los usuarios.
